¡Hola!
No me termino de acostumbrar a esta interfaz de Blogger, no es que sea complicada pero la anterior era mucho más de mi agrado. En fin.
Hoy les vengo a hablar, un poco, de mi experiencia como lector este año.
Como ya se habrán dado cuenta, por lo poco que he publicado este año aquí, o si han visto mi perfil de Goodreads, he leído bastante poco. Realmente estos últimos meses me he recuperado y eso me pone feliz, pero hay dos razones de que, por poco, haya evitado no cumplir con mi reto de lectura. Y una de esas razones son los audiolibros.
Nunca he sido bueno para los títulos, si no fuera porque las reseñas solo llevan el nombre del libro y el autor, no sabría qué ponerles de título a las entradas la mayoría de las veces. Así que no hagan mucho caso del título de esta entrada. A lo que me refiero con "la salvación de los audiolibros" es que gracias a estos he podido conocer más historias estos últimos meses. Poco más de la mitad del año no leí casi por temas escolares, pero hace dos meses aproximadamente que entré a trabajar y, como hago media hora de camino de ida al trabajo y media hora de regreso, aprovechando una promoción de 2 meses por $99 en Scribd, comencé a escuchar Asesinato en el Orient Express, de Agatha Christie. Confieso que al principio me fue un poco difícil acostumbrarme, de pronto quería mejor poner música, pero a los pocos días me acostumbré y ahora lo primero que hago antes de salir para el trabajo es poner un audiolibro. Desde entonces he escuchado cuatro audiolibros, de los cuales espero más pronto que tarde hablarles, pero esto me ha permitido tener viajes entretenidos y hacer un poco más llevadera mi sequía literaria (no, no me equivoqué, no quería decir "resaca").
Así que esta entrada no tiene nada de nuevo, todos o la mayoría sabemos que una ventaja de los audiolibros es que puedes escucharlos mientras realizas otras actividades, pero no está de más venir a platicarles, revivir el blog un poco, y quién sabe, a lo mejor uno de los pocos lectores o lectoras del blog que quedan se anime a añadir los audiolibros a sus traslados.
No voy a entrar en la polémica de si los audiolibros se debe considerar como lectura o no, sinceramente no creo llegar a dar mi punto de vista sobre eso. Al final, cada quien utiliza su tiempo y dinero en lo que quiere y le acomode.
Lo que sí les quiero contar es que actualmente estoy usando Storytel, además de esta, como ya les mencioné, utilicé Scribd. Sobre el catálogo, realmente no siento que una u otra tenga un catálogo grande de audiolibros, ambos me parecen que les falta mucho, pero sí he podido encontrar uno que otro libro que quería leer, necesitaba leer o se me antojó leer cuando lo vi. ¿Me gustaría que tuvieran más libros? Claro que sí, pero por el momento hay los suficientes para unos cuantos meses más, porque sinceramente no pienso cubrir mi tiempo de transporte con libros que de plano no tengo ganas de escuchar por más que estén ahí.
Ahora, los precios. La verdad no me parecen económicos, no para los catálogos que manejan, son más costosos que algunas suscripciones de streaming, pero mientras uno le saque jugo creo que vale la pena, como es mi caso actualmente. Si, por ejemplo, mi tiempo de traslado disminuyera a la mitad, ahí ya consideraría no pagarlo. Pero bueno, esto ya depende de la situación personal cada uno.
Así que eso es todo por ahora.
Por aquí nos seguimos leyendo.
¡Hola Alexis! :D
ResponderEliminarMil años sin pasarme por tu blog, perdón por todo :<
No he tenido oportunidad de escuchar un solo audiolibro y tengo muchísimas ganas de hacerlo, ¿hay alguno que recomiendes en particular? Para principiantes :D
¡Saludos!