Título: Fantasmas, espectros y otros trapos sucios
Autor: Jaime Alfonso Sandoval
Editorial: Ediciones SM
Páginas: 250
SINOPSIS:
Tito tiene una nueva ocupación nocturna: escuchar los relatos de su tío Chema a cambio de los quehaceres más desagradables. En cada relato Tito se entera de cosas insospechadas del excéntrico anciano: por ejemplo, de que en su juventud fue el reconocido locutor de radio llamado doctor Catafalco, o de cómo se enamoró de su extraña esposa. Así irá descubriendo que su tío no es lo que todos creen.
OPINIÓN:
Con la
experiencia que tenía después de haber leído Las dos muertes de Lina Posada no ponía en duda que Fantasmas, espectros y otros trapos sucios
me gustaría lo suficiente como para querer seguir leyendo más del autor, y no me
equivoqué, de hecho me quedé corto. Con este libro se ha fortalecido mi
fanatismo por aquello que salga de la pluma de Jaime Alfonso Sandoval, me parece
un autor arriesgado, creativo, muy original y decidido pues toma aquello que
más conoce, aquello que existe en su propio mundo, en su propio país y lo moldea de forma que
resulte una gran, gran historia. Tal es el caso de este libro, donde se nos
cuenta la historia de Tito y su tío Chema quien es un profesional a la hora de
contar historias de terror pues ha viajado a muchos lugares para conocer
aquellas leyenda, relatos y cuentos que se narran en los diferentes poblados,
así es como conocemos algunas de aquellas historias ya que se las cuenta a su sobrino
Tito, pero no gratis, antes de hacerlo tiene que limpiar una parte de la casa
de su tío, que se volvió una pocilga después de que su esposa murió.
Aquellas historias se vuelven únicas no solo porque fueron tomadas de primera
mano y porque son reales, sino por la forma en la que el tío Chema las cuenta y
la emoción que les pone, haciendo que quieras conocer más y más pues para que
Tito limpie la casa, el tío deja la historia en la parte más emocionante y
fuerte. Y eso sí, el final no es para nada lo que uno espera, es sorprendente y
te deja con los ojos abiertos, en ti fluye la emoción de haber sido sorprendido
cuando menos te lo esperabas, algo que le da un toque genial al libro, lo hace
mucho mejor.
Las historias son
varias, desde fantasmas hasta osos de peluche que se alimentan de sus dueños.
Fue por esta última historia que conocí el libro, en la quedada bloguera del
2012 el autor en persona nos empezó a contar la historia y como no podía ser de
otra manera, al igual que el tío Chema ¡nos dejó en la mejor parte! haciendo
que nuestros nervios se enloquecieran por conocer el final de la historia,
ahora que lo he hecho he comprendido perfectamente la posición en la que se
encuentra Tito pues al igual que él en aquel momento el autor me dejó con la
sensación de hacer cualquier cosa por conocer el final, hasta limpiar el baño
más sucio que uno se pueda imaginar…
Me sorprendí aún
más después de ver mencionado a Zacatecas, estado en el que vivo y del cual
normalmente no leo en libros de este género, más aún específicamente el
municipio en el que vivo y otros tantos lugares que conozco ya sea de pasada o
por el nombre, esto lo hizo más real y especial para mí pues es como un
condimento extra que le da un mejor sabor al platillo, en este caso al libro.
Lo recomiendo
mucho, a cualquiera, pero más especialmente a los lectores y no lectores
mexicanos, son historias que suceden en México y más aún porque el autor las
maneja de una forma que no deja nada indiferente, maravilla al lector.
“-Pero Tito, ¿qué esperabas? -respingó mi tío- ¿qué se casaran y tuvieran muchos hijitos? Es una historia de horror, de eso se trata. Los finales felices son un invento del cine, están pensados para que los espectadores coman más palomitas .”
Con Fantasmas, espectros y otros trapos sucios
Jaime Alfonso Sandoval ganó el premio El Barco de Vapor 2006, dejando sin lugar
a dudas que se lo merece pues innova en lo que hace y demuestra talento al
escribir, mostrar historias y plasmarlas de una forma única, divertida, fluida
y original. El autor no necesita apoyarse en lo que el mercado editorial ha
aprobado con todas sus publicaciones, el empieza y termina desde su forma de
hacerlo y logra resultados sorprendentes, por eso ganó el premio, porque es lo
que se busca publicar en El barco de Vapor, demostrar que se puede crear sin
tener que recurrir a aquello que el publico “ya acepta”.
5/5
¡Concuerdo contigo!
ResponderEliminarHasta ahora, en mis favoritos, hay un empate entre Las dos muertes de Lina Posada y el de El Club de la Salamandra.
¡Sigue leyéndolo!
Saludos n_n
Interesante, con lo que me gustan estas historias.
ResponderEliminarEsta genial esa cita, yo siempre he pensado eso. Cómo cuándo una historia es de maldad, sangre y cosas así y meten romance D:
Me ha gustado la forma que tiene su tío de chantajear a Tito. Por cierto en un momento de la reseña hay una errata pones "cada" en vez de casa.
ResponderEliminarSe ve un buen libro <33
ResponderEliminarbesote
Anotado, para cuando busco este tipo de lecturas para regalar
ResponderEliminarBesos
:) Suena interesante, me da curiosidad esa historia de los osos de peluche. ¡Y además menciona a Zacatecas :3!. Yo tampoco he leído libros de este tipo ambientados aquí o donde lo mencionen, tendré que buscarlo.
ResponderEliminar¡Saludos!
muy buen libro :3
ResponderEliminarmuy buen libro :3
ResponderEliminarpero no tiene 250 paginas tiene 204
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