Reseña: Flores de invernadero - Natalia García Martínez

Título: Flores de invernadero

Autora: Natalia García Martínez

ISBN: 9788415425151

Editorial: Éride ediciones

SINOPSIS:

Flores de invernadero es una novela de ritmo ágil, como la vida de la protagonista, Emma, ejecutiva de una importante agencia de publicidad, que combina su estresante jornada laboral con el cuidado de su hija, estudiante en Londres. Su entorno lo conforman Mercedes, su amiga del alma, a la que apoya sin condiciones para que pueda cumplir su íntimo deseo; Laura, su compañera de trabajo, que comparte con ella confidencias de su alocada vida y Alberto, su misterioso vecino. Emma hace partícipe al lector de su propio crecimiento personal, recordando experiencias vividas de su pasado y viviendo con intensidad el presente, en el que sus padres, su gran apoyo en los momentos más duros, comienzan su declive.

A lo largo de la novela se entremezcla una intrigante relación sentimental, sexual y apasionada, sin desvelar la identidad de sus protagonistas. Una novela actual, de amor y sentimientos en la que Emma consigue salir siempre adelante, por su determinación y sensibilidad.

OPINIÓN:

En Flores de invernadero hay bastantes cosas que puedo destacar (y destacaré), pero ninguna como su protagonista, Emma.

No soy mucho de libros contemporáneos como este, no porque no me gusten sino que pocas veces tengo la oportunidad de leer alguno que no tenga fantasía, en este caso es pura ficción, de esos que tienen una historia real, que a cualquier le podría estar pasando (o le podría pasar) y que si la historia se maneja de una forma correcta se crea algo realmente impactante ya que podemos ver cómo trabajan las emociones humanas y las reacciones que provocan. Volviendo a nuestra protagonista, es de esas mujeres que salen adelante solas, que en determinado momento pueden llegar a un estabilidad por ellas mismas, encontrar trabajo, mantener sola a su hija, vivir separada de sus padres y lograr aún así salir adelante, lograr una estabilidad emocional y económica, y aún teniendo sus altas y bajas poder superarse. Es bueno salirse de lo típico y encontrarte con personajes adultos, maduros y que piensan mejor las cosas, pero que aun así conservan su toque juvenil y siguen cometiendo errores.

La autora, Natalia García, logra crear una novela atractiva, porque cuando empiezas quieres seguir leyendo y leyendo para saber qué pasa con la vida de Emma, qué cambios suceden y qué problemas aparecen.

Su prosa me ha parecido muy interesante, pocas novelas (leídas por mi) tienen una narración como la de ella, al principio mi mente creía que la lectura se hacía lenta y demasiado pausada, nunca antes había visto tantas comas en una sola página, lo que me hacía sentir que iba más lento y no avanzaba, pero sorpresa, las páginas fluían y fluían como sin nada y yo disfrutaba cada vez más lo que leía, con esas pausas que provocan emoción, sentir, y tacto. Cuando creí que aún así eran demasiadas comas y/o puntos tocó una clase de expresión escrita y la maestra, leyendo un texto mío, me agregó unas cuantas comas, argumentando que así el lector podía darse respiros y leer con calma. Así pues fue como me dieron más y más ganas de leer novelas así, pausadas pero fluidas. Podría ser que no me explico bien, pero si es así, solo puedo decir que lo recomiendo (aunque habrá quienes podrían poner algunos peros). En la mayoría del libro es en primera persona, contado por Emma, lo que hace, ve y siente, pero también de pronto está narrado en tercera persona y en ocasiones por un narrador omnisciente, los cambios no se sienten, no alteran, pero si sorprenden y extrañan.

Por la historia, nos encontramos con una Emma que tiene que salir siempre adelante, lo cual logra con determinación, sensibilidad y fuerza. Una historia llena de sentimientos, sentimientos que tienen que cambiar muy seguido por culpa de los demás personajes y unas pocas bajas de la protagonista, sentimientos como amor, tristeza, enojo, pasión y deseo impregnan las páginas del libro.

Emma como ejecutiva en una empresa de publicidad trabaja junto con Laura, quien ama conocer hombres por internet y que sorpresivamente entra en una depresión demasiado fuerte, ayudada por un hombre que conoció por internet y le metió en malos pasos. Un hombre que tendrá (o que tuvo) mucha relación con Emma.

Así igual Alberto, el vecino de Emma, quien tiene problemas con su esposa por estar en paro y la necesidad de que ella trabaje tanto, por lo cual nuestra protagonista trata de ayudar a esa relación cuidando de su hija y moviendo contactos, pero no siempre las buenas intenciones pueden evitar desgracias. Así es como Emma no solo tiene que manejar sus problemas y/o situaciones, sino también lo de sus conocidos, estar pendiente de su hija que estudia en Londres, lo cual no le da tiempo de sentirse sola, pues cuando las cosas se ponen negras, siempre hay rayos de luz que mejoran todo, aunque no siempre se reciben buenas noticias.

La novela me gustó en su mayoría, pero tiene cosas que no me convencieron, principalmente el final de la novela. Deja cabos sueltos, varios no son demasiado importantes o interesantes pero aún así ¿qué razón hay de meter esa parte en la historia si no llevará a nada ni se le dará solución? Simplemente no cabía en la sorpresa al terminar el libro. No me gustó nada, deja varias cosas inconclusas de un solo golpe.

Flores de invernadero es una novela llena de sentimientos que afloran seguidamente, dura y veraz. Con una narración que te hace sentir cada oración.

3.5/5